El secretario general de Agricultura y Alimentación, Fernando Miranda, ha subrayado la necesidad de estimular la innovación más disruptiva, aquella que impulsa los desarrollos tecnológicos más novedosos, para que los productos agroalimentarios españoles ganen en valor añadido en los mercados y respondan a las nuevas tendencias de consumo.
Fernando Miranda ha inaugurado hoy, junto al comisionado especial para el PERTE Agroalimentario, Jordi Carbonell, la jornada “Alibetopías 2023: sistemas alimentarios, digitales, saludables y sostenibles”, organizada por la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB) y la plataforma tecnológica “Food for Life Spain”.
Este encuentro reúne a profesionales en innovación y emprendimiento para la puesta en común de iniciativas en I+D+i del sector agroalimentario. En esta edición, la digitalización, la sostenibilidad medioambiental y el foco del consumidor en su salud han marcado la agenda de la jornada.
En su intervención, el secretario general ha recalcado la importancia que conceden las políticas públicas a la innovación, el emprendimiento y la transferencia de conocimiento, tanto las españolas como las comunitarias, incluida la propia Política Agraria Común (PAC). En este sentido, Miranda ha indicado que el nivel de inversión en España en innovación y desarrollo sigue creciendo por séptimo año consecutivo, lo que pone de manifiesto los pasos decididos que se están dando para avanzar en una senda de financiación pública de I+D+i estable y creciente, con el objetivo puesto en alcanzar el 1,25 % del Producto Interior Bruto en 2030.
A este respecto, ha valorado la buena acogida que ha tenido la convocatoria de subvenciones del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación a proyectos innovadores supra autonómicos por grupos operativos españoles, dotada con 37,5 millones de euros, lo que evidencia que el Plan Estratégico de la PAC se está desplegando con toda intensidad.
Asimismo, el secretario general ha destacado la calidad y cantidad de los programas de incubación y aceleración de empresas emergentes (startups) del sector agroalimentario, que han contado con una inversión de 268 millones de euros (según datos del ICEX para el año 2022, con un incremento del 9 % respecto a 2021).
Fernando Miranda ha pedido aunar esfuerzos para que España se consolide no solo como una potencia exportadora donde la alimentación y las bebidas son el primer sector industrial, sino como un país referente en innovaciones tecnológicas de alto impacto en toda la cadena agroalimentaria.
Como ejemplo, Miranda ha apuntado que el 7 % de las empresas de alimentación utilizan ya la inteligencia artificial en sus procesos y que la robótica es la tecnología más implantada en el sector agrícola (segundo sector en el que más se ha incrementado la venta de robots). Para el secretario general, esta edición de Alibetopías y las startups premiadas evidencian el buen hacer del sector en materia de biotecnología.
Por otro lado, ha puesto en valor el papel de los socios que colaboran con el ministerio en el estímulo del emprendimiento tecnológico de alto valor a lo largo de la cadena alimentaria, entre los que ha citado los premios Ingenia Startup y Outgenia Startup de FIAB.
También ha mencionado otras iniciativas de colaboración del ministerio, como el programa AgroBank Tech Digital INNovation, junto a Caixabank, el apoyo a startups por el Centro nacional de Tecnología Alimentaria (CNTA) a través de la iniciativa "Food (Tech) Challengers"; el reciente convenio con el centro tecnológico AINIA para apoyar a startups en cadenas de valor de bioeconomía – START BEC; y la línea de créditos de ENISA Agroinnpulso al servicio de los proyectos empresariales más arriesgados.
Miranda ha asegurado que el programa de incubación y aceleración de startups agroalimentarias es ya una realidad, a través del hub (nodo) de innovación digital del ministerio “La Vega Innova”, diseñado para impulsar la transformación y competitividad del sector agroalimentario a través de la experimentación en entornos reales, la resolución de retos y la formación.
